
También comentábamos del desarrollo en la región de un clima ideal y con tierras privilegiadas, es ahí donde Indalo va a plasmar lo que significan los aceites de alta calidad, ya que las fincas que posee ubicadas en el Valle de Pomán, Catamarca, presentan el terroir justo para la plantación del olivo, ya que se encuentra resguardada por las altas sierras y con elevadas temperaturas lo que le confiere al proceso de cultivo la mejor selección de sus plantas en viveros propios.
Los árboles de aceitunas plantados son de diferentes variedades: Frantoio, Manzanilla, Arbequina, Coratina, Picual, Barnea, Arbosanna y Changlot Real, por lo que debido a la constitución de todo el sistema de plantación, se elaboran tanto aceites varietales como coupages o mezclas.
En este caso Indalo Selección Especial es un coupage de Coratina y Arbequina y presenta un color amarillo dorado con tonos verdosos, aromas muy frutados que corresponden principalmente

Por otro lado, el Indalo Premium elaborado con oliva especialmente seleccionada presenta un aspecto visual muy brillante con un color amarillo dorado intenso con características frutales más maduras y suaves, sabores complejos con frutas y vegetales equilibrados armoniosamente, ligeramente amargo y levemente picante, untuoso en el paladar, y suavemente cremoso con una acidez máxima de 0,3%.
Estas dos expresiones del aceite de oliva virgen extra Indalo, forman parte de ese inmenso andamiaje de gratificantes sensaciones que nos rodean y que aportan muchas razones más para combinar un conjunto de aromas y sabores a los que día a día nos vamos acercando y aprehendiendo en la inagotable búsqueda de nuevos y agradables deleites de la vida. Bon Appetit.